De acuerdo a un estudio realizado a cientos de adolescentes en España y Latinoamérica, la presencia digital de la generación Z está compuesta por entre 6 y hasta 10 perfiles abiertos. Son capaces de utilizar cada uno de ellos con una finalidad específica y a la vez integrada con el resto.
Para las empresas, los teens se han transformado en indescifrables objetos de deseo a los cuales necesitan conocer para vender sus productos, convertirlos en tribus afines y asociarlos como influencers de sus propuestas, sostiene Rafael Fernández Tamames, co-fundador y Managing Partner de Findasense, consultora en transformación digital.
Facebook es la red que más utilizan aunque muy cerca de Instagram. Snapchat, la red divertida, se posiciona tercera en el ranking, seguida de Twitter. Pinterest y Tinder las que menos usan. Sus amigos son las personas en la que más confían y creen. Los famosos y las celebridades tienen poca influencia para ellos. Además, consideran que los influencers recomiendan como parte de su trabajo.
Según explica la investigación, los adolescentes son coleccionistas de momentos, su memoria es Google y el fenómeno Instagram les ha hecho desarrollar una nueva ‘memoria anticipada’ debido a que se imaginan el resultado de la experiencia que viven, la foto, incluso antes de que suceda”. La investigación se realizó entre 700 jóvenes, de entre 14 -19 años, en España y Latinoamérica.
