'Todos los discos tienen su cara B'

Un año más desde el Periódico PublicidAD hemos lanzado nuestro ‘Especial Agencias’ en el cual los profesionales mejor cualificados ofrecen su particular punto de vista sobre el panorama actual del sector. Hoy le toca el turno a Celia Caño, directora general de Equmedia. ¡No te lo pierdas!.

“A estas alturas me parece que poca gente discute los beneficios del teletrabajo, entre otros los de evitar desplazamientos y atascos y las facilidades que aporta para la conciliación familiar. Y eso por no hablar del gustazo que da sustituir el traje de chaqueta y los tacones por las zapatillas y el pijama. Las ventajas son evidentes, creo que casi todos estamos de acuerdo en eso. Pero todos los discos tienen su cara B. Aclaración para los más jóvenes: un “disco” era una cosa redonda que solíamos utilizar para escuchar… Bah, déjalo y confía en mí. Todos los discos tienen su cara B.

Y, en este caso, me parece que los fanáticos más radicales del team pijama están prestando muy poca atención a las canciones de la cara B, unas canciones que también están en el disco. Déjame hablarte de algunas:

1.- Charlando con el ficus. Para nosotros los humanos, el contacto con otros humanos es muy importante. Cuidado con el aislamiento social. Las conversaciones banales alrededor de la máquina de café tienen más trascendencia de la que parece, tanto a nivel de productividad como de simple bienestar personal. Si la máquina de café está en tu casa, acabarás charlando con el ficus de la encimera, que no suele estar al tanto de lo que se cuece en la oficina.

2.- El misterio del último correo. “Contesto un correo más y me voy a casa”. Pero ¿a dónde vas a ir si ya estás en casa? Cuando tu oficina y el comedor son la misma cosa, desconectar puede resultar (aún) más difícil. La línea entre “trabajo” y “hogar” se puede volver muy difusa. Y el hogar debería ser un puerto seguro, un refugio en la tormenta donde nos sintamos a salvo de los rayos.

3.- La tentación vive justo aquí. Las series de Netflix, los últimos capítulos de ese libro tan interesante que estás leyendo o, simplemente, el sofá del salón pueden ser tentaciones demasiado poderosas, casi irresistibles. En un mundo ideal nadie necesitaría supervisión. Pero, por desgracia, tú y yo sabemos que estamos lejos de vivir en un mundo ideal. Muy lejos.

4.- Pijama y ascensos: un amor imposible. Cuando los jefes piensan en cubrir una vacante para un puesto de responsabilidad, suelen fijarse en primer lugar en aquellas personas a las que pueden ver. Lo mismo vale para formaciones, invitaciones a eventos, etc. Es un axioma: fuera de la vista, fuera de la mente.

5.- La canción del extranjero. Si llevamos las cosas a su extremo, conviene no olvidar que el teletrabajo puede hacerse desde cualquier lugar del mundo, incluidos países con costes laborales inferiores al nuestro. A fin de cuentas, si el trabajo va a hacerlo alguien que nunca aparecerá por la oficina, ¿por qué no contratar directamente a un técnico hindú (o latinoamericano, o chino)? Los hay buenísimos, no te engañes. Si todo se acaba reduciendo a costes, lo más probable es que pierdas.

En fin, estos son solo algunos de los grandes éxitos de la cara B. Hay más, pero me parece que, escuchando estos, el pijama empieza a resultar un poquito menos cómodo. No digo que haya que tirarlo a la basura, ojo. A mi juicio, es perfectamente posible disfrutar de lo mejor de ambos mundos.

Pero tenemos que ser listos ¿no os parece?”